REDES SOCIALES EN DERECHO
Hoy en día, las redes sociales representan una importante herramienta de comunicación e interacción, que permiten obtener información inmediata. Por ello, el estudiante de Derecho o el abogado que no domine las redes puede ser que se quede a la saga de su competencia.
Una reciente encuesta publicada por el American Bar Association, da cuenta de como en el 2013 se ha reportado en Estados Unidos que:
– El 27% de Estudios de Abogados en dicho país tienen blogs.
– 59% de los Estudios de Abogados mantienen presencia en las redes sociales como Linkedin o Facebook
– En forma individual el 81% de abogados reportan usar las redes sociales para fines profesionales.
Como se puede apreciar, este estudio demuestra de una manera clara como es que las redes sociales es nuestro presente (quien sabe si será el futuro) y que por ende debemos de aprender a usar esas nuevas herramientas que cada día se vuelven más esenciales para nuestro ejercicio profesional de abogados.
Más allá del uso que hagamos de las redes sociales como abogados, resulta claro que las nuevas tecnologías nos traen también nuevos retos como abogados al vernos enfrentados a nuevas realidades donde las actuales instituciones o reglas jurídicas no son suficientes.
Por ejemplo, en el caso del uso de los correos electrónicos en los centros laborales y su posibilidad de que sean fiscalizados y leídos por el empleador es un tema que resulta muy polémico al involucrar temas de violación de las comunicaciones e intimidad que las reglas referidas al secreto de comunicaciones no llegan a cubrir totalmente.
En lo personal ya he visto varios casos en los que se han iniciado procesos penales de difamación sustentado en comentarios colgados en blogs o en los muros de Facebook.
Los abogados además hemos procedido a cambiar nuestras cláusulas usuales de confidencialidad que se usan en los contratos, para comprender expresamente a las redes sociales y la prohibición de divulgar en las mismas información clasificada como confidencial por las partes.
Pero la problemática jurídica de las redes sociales tiene muchas más aristas. Una que ya he tratado antes es el caso del juez que tiene como “contacto” en Linkedin a una de las partes, o si es “amigo” de una de las partes en Facebook, ese juez ¿puede ser recusado por amistad manifiesta con esa parte y ser apartado del proceso judicial en el que está interviniendo?
Las nuevas generaciones de estudiantes de derecho, que pertenecen a la generación de los millenials o nativos digitales, tendrán tal vez mejores perspectivas para resolver estos retos jurídicos que los abogados pertenecientes a otras generaciones.
Las redes sociales en la carrera de derecho son muy fundamentales ya que gracias a estas redes podemos profundizar u obtener y desarrollar más conocimiento sobre temas jurídicos y virilizarse a nivel mundial ya que gracias a las redes sociales muchos trabajos son realizados por vía virtual y es más rápido y eficiente tanto para el abogado como para el cliente de cierta forma se verían en casos de firmas etc.
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